El verdadero desarrollo incluyente debe alcanzar a todo el país, afirmó la presidenta del Comité Directivo Estatal (CDE) del PRI, Ana Lilia Herrera Anzaldo, al manifestar la necesidad que el próximo Presupuesto de Egresos de la Federación considere los recursos suficientes para materializar lo que se aprobó a favor de las comunidades indígenas y afromexicanas.
Al fijar posición sobre la votación de los legisladores federales priistas que estuvieron a favor de la reforma que concibe a los pueblos y comunidades indígenas como sujetos de interés y de derecho público, estableció que las causas y necesidades de este grupo social siempre están presentes en la agenda de trabajo del PRI.
Puntualizó que durante el análisis previo a la iniciativa, el PRI presentó 22 mejoras al dictamen, que fueron rechazadas por los legisladores del oficialismo y sus aliados. Por tanto, los legisladores del Revolucionario Institucional llamaron a consolidar los derechos de estos grupos para nunca más tener un país que camine alejado de su origen.
Las causas de los pueblos y comunidades indígenas y afromexicanas, no son nuevas, “forman parte de la agenda de trabajo que atienden la Confederación Nacional Campesina (CNC) y la Secretaría de Acción Indígena de nuestro partido”, aseguró la dirigente estatal del PRI.
Dijo que la reforma votada a favor por el PRI constituye un paso hacia la justicia social, “se reconoce a estos grupos como sujetos de derecho público y se vela por la propiedad intelectual del patrimonio cultural; para el PRI, es una prioridad la preservación y difusión de las lenguas indígenas”.
Afirmó que el PRI ha convocado a los estados y municipios a sumarse de manera comprometida en la creación de los Planes de Justicia y Desarrollo Integral de pueblos y comunidades indígenas.
El PRI considera que la deuda con los pueblos indígenas y afromexicanos se saldará hasta que la dignidad, la igualdad de oportunidades y la falta de seguridad sea una realidad más en nuestro país, agregó.